Una vueltita por el norte

Una vueltita por los terruños del Pato Loco

El jueves 4 de agosto fui donde con el Tequilero y el Titodezert a cambiarle aceite y filtro a la Pitufina, lavamos la cadena, la tensamos y le puse unos ganchos para poder amarrar bien la bolsa del equipaje. Con la bendición del Manuel y el Tito, asimilando las recomendaciones de la vueltita pal norte, me fui a terminar los últimos pendientes para salir el viernes 5 de agosto a primera hora.

Viernes 5 de agosto 9:00 horas, moto con equipaje y piloto listo para darle por la libre hasta Ojuelos, Jalisco límite con Aguascalientes, treparme a la brecha y darle hasta Estación catorce, San Luis Potosí. Sol, runrunear del motor, viento, a gusto, disfruté todo, todo. Hace ya 8 meses que no hacía un viaje largo, de al menos una semana. Entrando rápido a la presa Gertrudis, cerca del valle de las Margaritas, veo sobre la huella peyotes, al querer hacerles el quite para no pisarlo, fue que muerdo con un piedronón la cámara delantera y ahí, a eso de las 19 horas, me doy cuenta que la llave francesa y el dado 19 no los traía, pues no me quedó más que armar el campamento, cenar mi medio pollito que había comprado en Ojuelos y dormír exhausto, fatigado, agotado a eso de las 8:30. Me destino final ese viernes era Estación catorce, casa de Martín y Pablo para pasar a saludarlos y ver si el bebé de Martín ya estaba bien, ya que hace año y meses cuando pasé por aquí para ir a Alaska, ese bebé estaba muy malito, si empeoraba, tenía en mente decirle a una colega pediatra que lo fuera a ver.

El sábado a eso de las 6:00 horas dejé el campamento y salí caminando a la carretera para conseguir una herramienta, recién salido encontré una troquita, la paro y me da un perico, le digo que lo voy a dejar donde Martín y que me regreso a la presa a reparar mi llanta, a eso de las 10:00 ya estaba con Martín, y sorpresa mía fue que el niño estaba despierto, chocamos de manos, me hizo plática, muy fuerte, muy bien… voy a comprar de desayunar y nos dimos una sentona de huevos y tocino y pan que me regresaron las fuerzas. Entre la plática y las historias, aparece el Pablo y me regala un cuero de lince para el asiento de la moto, y a eso de las 12:30 salí para encontrarme con @angelitos.

Subí por Real de Catorce, hice un café viendo a unas turistas citadinas que neta, no me daban ganas de irme, pero @Angelito estaba en camino. Decidí subir por las 57 y más adelante del cruce para Linares, a la altura de Catarino Rodríguez, me trepo a la brecha que me dio @guardiandeltopo y llegué a eso de las 19 hora a la cabaña del Patoloco, hasta que conocí las montañas del PAtoloco, la señora Concha, todo se me hizo muy conocido, rápidamente nos sentamos a platicar con el señor José y la Doña y el nieto Gael, que hacía berrinche para dormir… a la media hora llega el @angelitos y comenzó este gran viaje por el norte, Nuevo León y Coahuila fueron los destinos, dignos de todo tierroso.

El domingo salimos a eso de las 10:30, hicimos una brecha con unas subiditas piedrosas perras, le dimos un rato rápido a la brecha, no veíamos a nadie y le dimos acelerador hasta que el calor ME ganó, me detuve, agua, cigarro y al salir de la brecha, ante la pregunta: seguimos por brecha o le damos al chapopote, pues… nos metimos por el cañón de El Pajonal, majestuoso lugar, hermoso, increíble, nos fuimos por el lecho del río seco unos 20 km, le dimos un rato al baile de la culebra, le metimos acelerador a momentos, @angelitos delante, sino yo me aloco, le dio a esa noble Tornado todo el tiempo como una enduro, con sus llantas de calle, parecía que los gajos le salían para agarrar tracción…. Terminando El Pajonal, nos fuimos a la muralla Rompepicos en Santa Catarina, Nuevo León, unas fotos de rigor y rodeamos la ciudad para llegar al otro extremo, para dormir el domingo en El Paredón, lugar humilde, marcado por las vías del tren, y el calor duro, el sol rudo… en fin. Todo el tiempo nos ganó la plática y las ganas de compartir esto que es rodar.

Espinazo y Castaños fue donde terminó la brecha, @angelitos me acompañó a Cuatro Ciénegas y a eso d las 15 horas él se regresó a Monterrey. Yo me fui a campar a “los Mezquites” unas pozas que son de agua semitemperada, con instalaciones muy rusticas, pagué 40 pesotes por acampar, el viento, la nadada con tortugas … excelente lugar, muy recomendable para todos los tierrosos. Dormí a eso de las 8:30, me desperté a eso de las 23 hora, con música norteña a todo volumen, salí a ver si estaban a un lado mío, pero nada, era un troca con una pareja de enamorados, fui a conocer por qué tanto volumen… cuando me vieron prendieron la troca y se fueron.

A eso de las 6:30 del martes ya estaba con mi café en la mano y atravesé los 150 km de brecha para llegar a Esmeralda-Providencia. Ahí almorcé y cargué gas y a eso de las 12 hora me metí a la brecha para la zona del silencio. En el inter, encontré a cuatro compas en un cruce que te lleva a la mina de Hércules, esa brecha es la que te lleva a Camargo, son 270 km, estos me decían que era más viable que hiciera esta ruta, ya que la zona del silencio sería un horno.

La zona del silencio el año 2010 no la pude atravesar desde Esmeralda a la carretera Durango-Chihuahua, por lo que esta vez, comí bien, me hidraté perfectamente bien y a darle.

Zona del silencio desde Sierra Mojada, la primera reserva natural de América Latina.

Esmeralda – Guimbalete-laguna de las palomas- carretera 49, esta era la ruta que traía. Cuando salgo de Esmeralda, me dicen que a Guimbalete hay puertas con candados que no puedo pasar, por lo que el Señor del almuerzo me recomendaron meterme por mero Esmeralda … encontré una primera puerta y sentía el calor intenso pero aguantable, el primer candado le di la vuelta por pisadas de caballo hasta que logré pasar las puas, mi dirección era Guimbalete (nortwest) sin embargo la brecha se terminó en un río seco de piedra redonda… a eso de las 4 horas de avanzar y hasta que encontré un huizache grande, me paré, tomé agua, comí palanqueta, vi el mapa bien y pues me vi sin salida. Sentí olor a incendio, empiezo a distinguirlo y estaba en mi dirección, le du unos 40 minutos más y encuentro a un don, le da gracias verme, me recibe como de fiesta… comemos palanqueta, fumamos, y me comenta que sí que la entrada correcta es pasando Esmeralda, que la gente que me quizo ayudar me había perjudicado.

Me recomienda salirme de mi ruta, que el calor esta a eso de 45 a la sombra y más usté con esa chamarra, no se vaya a “quebrar” ahí dentro. Le pregunto en dos ocasiones que dónde esta el puto más cercano de chapopote y en las dos ocasiones señaló el mismo y lo marqué en el mapa como línea recta. Comimos carne seca, arándanos, tomamos agua… lo que hace es quemar hoja y rama seca para abrir espacio a los animales estábamos en la barda superior del río seco.

A eso de las 18:30 horas vi el primer techo, Rancho Santa María, Coahuila. No había nadie, sin embargo me saco el casco y todo el equipo, me saco las botas odiadas y amadas… y ya no podía más, decidido a acostarme, hidratarme con mi litro de agua caliente que me quedaba y comer lo poco calórico que llevaba. A eso de las 20:00 horas llega el Señor Ismael con su hijo en una estaquita de Nissan, me dan la bienvenida, que “escuchabamos el motor de una motosierra, pero ahora que lo vemos, Claro! Era usté en un señor motonón”, le explico mi fallida travesía en la zona del silencio y me comenta cómo atravesar la Zona del silencio:

1. Se hace en octubre, de mediados para delante.

2. Usté iba hacer la ruta más corta, pero como hay puertas, ya no la pisa nadie, debe estar borrada.

3. La ruta correcta por terracería es por el lado de Chihuahua, pegado a las vías del tren, por la zona norte. No sabe donde está el Ejido La For en Durango, pero esa es la única entrada “oficial” de la zona, donde debes registrarte como un visitante, biólogo, astrónomo…

https://www.google.com.mx/maps/dir/...e611cd!2m2!1d-103.739018!2d27.0213506!1m0!3e1

Como vemos, pues, hay entradas al corazón de la zona, pero no propiamente puedes cruzarla por su columna, el calor es devastador, devastador…. Ya se me hará hacerla y vivir esta experiencia que tenía en mente.

4. Qué es la zona del silencio? En lo más profundo del desierto entre Durango, Chihuahua y Coahuila, la Zona del Silencio ha causado una gran controversia desde hace décadas. Historias de misteriosas luces, fenómenos que interfieren en los sistemas electrónicos, extrañas plantas y criaturas, personas misteriosas, fantasmas y rocas calientes que caen del cielo han hecho de este lugar un destino mítico para muchos. Ufólogos, parapsicólogos y científicos investigan todos estos fenómenos en la Reserva de la Biosfera Mapimí. ¿Qué es lo que ocurre?... Francisco Sarabia, el piloto que sobrevivó al misterio Francisco Sarabia Tinoco era el más famoso pionero aviador en México, debido en parte, a su récord de velocidad volando entre la Ciudad de México y Nueva York en 1939. Sarabia ha sido homenajeado a lo largo de los años con estatuas, sellos especiales de emisión que llevan su imagen y otros monumentos. El aeropuerto nacional en Tuxtla Gutiérrez, Chiapas, lleva su nombre. En la década de 1930, Sarabia volaba sobre Durango cuando entró en el espacio aéreo situado sobre el desierto de Chihuahua. De repente hubo un silencio de radio, que alertó al control del tráfico aéreo que algo no iba bien. Sarabia tuvo que realizar un aterrizaje de emergencia después de que su equipo fallara. Él sobrevivió, pero ni él ni los ingenieros pudieron encontrar explicación a lo que había ocurrido. Este fue el primer caso conocido de problemas técnicos en la Zona del Silencio. Hay bastante más cosas, esto fue lo que yo leí hace años.

Al otro día salí a eso de las 8:00 luego de los respectivos cafés, desde Rancho Santa María hasta Durango… me sentía muy golpeado, deshidratado, me molestaba la luz del sol, fatigado…. Tomé cocacola (yo casi no le entro a esa drga) y algo me ayudó, gatorate algome ayudó, burritos de harina y vegetales con salda picosa y algo me ayudaron… cargué en mi camel 2 litros y fui tomándomelos en unas 5 horas… nunca oriné…. A eso de las 20 horas llegué a Durango-Durango, caí acá por menso, la neta era mejor dormir en Torreón, que ya conozco un hotel muy bien y económico.

Miércoles: Durango- Sierra de órganos. Este día fue chapopote como 250 km y caí al lugar donde la naturaleza todavía se relaciona entre naturaleza y uno un simple extraño. Entrando al parque, se puso a llover rudo, enla caseta me ofrecieron unos tacos de rajas y chicharrón prensado, dos chicas muy agradables que me tacharon de medio loco, por qué va acampar, por qué no quedarse en las cabañas (650 pesos la noche para 6 personas). Fui a la acampada y neta se cayó el cielo…. En un inter que paró, monté mi tienda, mientras los coyotes aullaban como pidiendo más más agua… dormí ese día a eso de las 20:00 horas, tomé bastante agua más para reponerme. Al otro día antes de amanecer salí a recorrer el parque hasta eso de las 12 horas… me metí a Sombrerete (hoy pueblo mágico) lugar de cantera roja y rosa…. Agarré la brecha hasta Trujillo y al empezar el chapopote que me llevaba a mi segundo pueblo natal, Valparaíso en Zacatecas, que se apaga la Pitufina…. Tsss la pila dije. Caminé con la moto 1 km, llegué a un rancho donde vendían queso añejo, y Sergio al ver la moto, le brillaron los ojitos…. “no la vende” jajaja no se apagó, luego de hacerle las pruebas correspientes, le digo: me llevas a Valparaíso? Necesito una pila nueva. La armamos de una vez, ya que son las 17 horas….

En la troca de Sergio, llegamos a eso de las 18 horas, directo a un taller-refaccionaria y las pilas que tenías no cabían en el espacio. Dije: una china chica y se reían…. Dormí en mi pueblo, al otro día cuando abrieron los comercios, conseguí una pila más pequeña que la origina y con esta ya me vine desde Zacatecas a Guanatos, solo 205 km de sierra y curvas y curvas…

Entré por Zapopan, atravesé la construcción del tren que están haciendo, conocí puerta de hierro en Guanatos y a casa a eso de las 20 horass, a gusto y contento de comprobar que el México rural es otra República, las ciudades cada vez me atraen menos.

Abrazo, Rodrigo





cargando gas en Guiambalete, Chihuahua.


@angelitos al término del Pajonal, Nuevo León, México


En el fondo la Rompepicos, El Pajonal, Santa Catarina, Nuevo León


Wirikuta, San Luis Potosí


Ojuelos, Jalisco


Sierra de Órganos, Zacatecas


Charcos de Risa, Coahuila



Al términoo del pajona, moto21.com.mx he sacado varios tramos del "norti" por estos aventureros

Las montaañas del pato loco

Los niños del pato loco


El río del pato loco


Recuerdos para el Pato Loco

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